Poniéndome desde el lado de quien atiende al cliente como del lado de quien recibe esa atención diariamente, concluyo con que la atención al cliente en Venezuela no es un tema al que se le preste mucha atención. Considero que la misma es sumamente importante, y va más allá del hecho de "atender a las personas".
¿Se trata de atender a las personas? Sí, pero tomando en cuenta que esa atención sea de una manera cordial, cálida, respetuosa, paciente y logrando en lo posible ayudar a los consumidores en lo que necesiten y disipar todas las dudas que estos posean acerca de aquello que desean adquirir.
Una adecuada atención al cliente no sólo le generará ventas a una marca, tienda o empresa sino que además la imagen de la misma crecerá, será reconocida por sus buenos servicios generando por ende fidelidad por parte de los consumidores, serán recomendados y aumentarán consecutivamente su cartera de clientes.
Si bien, atender al público no es una labor sencilla, ya sea porque siempre hay clientes difíciles o porque tenemos días pesados en los que nuestros problemas personales nos agobian, entre otros factores. Esto no es motivo para ofrecer una atención desganada, molesta o "a los golpes".
En líneas generales, el nivel de atención al cliente que se ofrece en numerosos lugares de Venezuela no es una atención de calidad.
Por ejemplo: ¿Cuántas veces no nos ha sucedido que entramos a una tienda de ropa y nos agobian varios vendedores de la misma, no sólo haciéndonos preguntas y recomendando cosas en las que no estamos interesados sino que además nos siguen a todos lados?.
Como clientes queremos ser bien atendidos de una manera que yo podría llamar "equilibrada", es decir, sin que nos incomoden o invadan nuestro espacio personal, pero tampoco que no nos respondan, nos escuchen pero estén distraídos con el celular, entre otras cosas que presenciamos todos los días.
En Venezuela sería ideal el implemento de cursos de capacitación para el personal de una tienda o empresa antes de que el mismo empiece a laborar. Un personal capacitado estará en condiciones de ofrecer un servicio de alta calidad, tratando a estos de manera adecuada y sabiendo sobrellevar situaciones complejas que se puedan presentar.
Siempre recuerdo que "Un cliente bien atendido es un cliente que se irá feliz y que si posiblemente regresa, lo hará, pero feliz".
Un monólogo de la queridísima Erika de La Vega en su programa "ERIKA TIPO 11" (programa transmitido por Venevisión Plus). En este video verán como de una manera cómica y sarcástica, Erika nos deja más que claro cómo es un mal servicio en Venezuela (al que lamentablemente estamos acostumbrados).
Les invito a ver el siguiente video:
"Atención al cliente: El mal Servicio"